Abogada y activista feminista franco-tunecina, Gisèle Halimi (1927-2020) es una figura importante en la lucha por los derechos de las mujeres, especialmente a través del juicio de Bobigny y el juicio de Aix-en-Provence. Hija de Fortunée Metoudi, sefardí, y de Edouard Taïeb, bereber, Zeiza Taïeb nació el 27 de julio de 1927 cerca de Túnez y creció en el protectorado francés de Túnez. Sus padres, que esperaban un niño, reaccionaron de manera diferente a su nacimiento. Zeiza testificó más tarde que su madre no la quería y favorecía a sus hermanos, mientras que su padre la quería tiernamente. Este desamor materno y esta decepción parental fueron fundamentales en el feminismo de la niña, al igual que su infancia en una colonia francesa alimentó su compromiso con la descolonización.
Leer el articulo publicado en L’Histoire par les Femmes (en francés)