Erich Fromm.

Este hombre de paz, humanista convencido, nos insta, como Bruno Bettelheim en Le coeur conscient, a desobedecer: ídolos, ideologías políticas, ideas preconcebidas, conformismos de todo tipo. «La historia de la humanidad», escribe, «comenzó con un acto de desobediencia y no es improbable que termine con un acto de obediencia». La urgencia está ahí y el autor no deja de decírnoslo a través de esta colección de ensayos que reunió la víspera de su muerte en 1980. Fromm expone aquí su punto de vista sobre las condiciones fundamentales de una vida plenamente humana (la necesidad de relaciones humanas, de arraigo, de trascendencia y de identidad) y critica todas las estructuras sociales que se oponen a su realización. Los Estados técnicamente avanzados han producido un «homo consumens», un «niño eterno» habitado por la pasión de poseer y consumir, solitario, ansioso, aburrido. El autor denuncia la burocracia industrial, esta civilización «necrófila» que se encuentra tanto en el capitalismo como en el comunismo totalitario. Aboga por un verdadero socialismo humanista que dé prioridad al trabajo sobre el capital, al hombre sobre los objetos, a la vida sobre la propiedad.

Paidos, 2011

Erich Fromm (1900-1980) Sociólogo y psicoanalista americano de origen alemán, uno de los primeros representantes de la Escuela de Frankfurt, fue uno de los primeros pensadores del siglo XX en hablar de la idea de un ingreso básico incondicional.