NI  UNA GUERRA MAS, NO CON MI SILENCIOSA COMPLACENCIA, NO EN MI NOMBRE, NO CON MIS IMPUESTOS, NI HOY ALLÍ, NI MAÑANA ALLÁ.

Somos ciudadanos del mundo, hermanos de especie, residentes aquí, y no queremos daños ni a Ukranianos, ni a Rusos, ni a chinos, ni a Españoles, ni a árabes, ni a palestinos, ni a israelitas, ni a sirios, ETC.. …¡ni a ningún humano más!

El día que fuimos paridos nuestras madres no soñaron para nosotros  que fuéramos a trabajar matando. Los hijos que hemos traído al mundo,  tampoco fue para que vivan una locura de mundo tras otra locura, ni para acostumbrarse a un tipo de violencia tras otro, y menos para que un siervo sin cabeza  mandado por el psicópata de turno nos los mate, por mucho que sea presidente de una nación, por mucha empresa de armas, o empresa X, que quieran voraces beneficios..a costa de malvivir vidas humanas. Por mucho cabronaje y robo e invasión, disfrazado  de defensa, o de ideal político, o religioso, o de pacto de protección, sea la alianza militar que sea:  empujando las guerras está el dinero y el Yo grande, un agujero negro de oscuridad que engulle, y  la enferma venganza. Y  dos pueblos que ponen los muertos,  con sangre de muchas víctimas heridas y muchísimas vidas destrozadas durante generaciones.

Estamos en el 2022, hay nuevos niños naciendo en el mundo, ha llegado la hora de que se detenga judicialmente a todos los causantes de guerras, invasiones, venta de armas.  Es tiempo de dejar el miedo aparte y salir a las plazas del mundo, y en la próxima sesión parlamentaria frente a cada parlamento mundial,  seamos más personas cada hora, exigiendo que las guerras sean YA calificadas crímenes contra la humanidad. Que la fabricación de armas se cierre, en todos los países del mundo, y que empiece el desarme unilateral y los acuerdos para el desarme multilateral.

Exigiremos cada uno a nuestros propios parlamentos y nos pondremos de acuerdo entre países para exigir a todos los parlamentos del mundo, uno a uno, que siguiendo el ejemplo de Bolivia, y otros, se comprometan en sus constituciones a no iniciar ni favorecer ninguna guerra. Que se ilegalicen las armas  tradicionales, firmen todos los que  se demoran el tratado de prohibición de armas nucleares, que se disuelvan los pactos bélicos de defensa entre países, que se prohíban las invasiones “de supuesta ayuda que acaba en robo de recursos”,  que se desvele la verdad de la macro industria bélica, las armas químicas, la fabricación de armas biológicas, las tecnologías de jaqueo de datos en organismos  inter-nacionales, las guerras santas, las guerras mediáticas, el terrorismo, el uso de amenaza con vidas humanas, la violencia económica que poner el dinero por encima de todo, de las personas, de la vida en el planeta. Que esté penado  el adoctrinamiento para la guerra, que se elimine EL HAMBRE y la escasez de oportunidades tecnológicas,  que se penalicen  las guerras locales de mafias, las personales de bandos, las de géneros y familias, las guerras de divorcios por poseer las propiedades el dinero y los hijos, y  desposeer al otro de sus  hijos, su poder, sus recursos, etc.

Humanidad: llegó el tiempo del cambio personal y social, y nada podrá detenerlo, si no consentimos más crímenes y abusos. La violencia en todas sus formas debe ser inmediatamente reflexionada, detenida, y juzgada, luego corregida y reparada doblemente.

Que un grupo de jueces independientes, votados nacionalmente por otros jueces , de los pueblos afectados (en este caso Ukrania, Rusia, China, pero también Rumanía, EEUU, países OTAN, Siria, Israel, etc..), les demos potestad para detener y encarcelar a los presidentes de gobierno y otras empresas que tomen decisiones estratégicas político-económicas-  de robo, invasión y ataque a otros pueblos, se justifiquen como se justifiquen y nos cuenten los cuentos que quieran. Ya no los creemos.

Que se inicie este año un diseño de reconversión de los ejércitos en cada país, para cualificarse y reciclarse como expertos en paz, y tal y como hacen ahora, una labor impresionante en catástrofes naturales, humanitaras y sociales, y que obedezcan siempre , no a un gobierno violento y asesino, sino a la paz, a la constitución de los pueblos, a los derechos humanos, a la soberanía del pueblo y no a políticos psicópatas y accionistas, socios en la industria de matar, sea como sea.

Salgamos a las calles, vayamos andando hasta  las plazas ante las sesiones de los  parlamentos, formando círculos de paz y de noviolencia, y también circulando con coches y bicis en masivas caravanas hasta embajadas,  sin violencia ninguna, pero con la fuerza que da la noviolencia, y la ética de los pueblos, queriendo tratarse bien. Entreguemos a nuestros parlamentos y gobiernos escritos y mensajes y presión popular, ilegalizando las guerras y la  violencia  en todas las constituciones del mundo, no mas tarde de ya, para que se logre en el primer semestre  del 2022. Y si no, no votemos a nadie.

NOSOTROS, NO QUEREMOS más robos DE RECURSOS DE PAÍSES, ni más apisonadoras arrasando personas, no más pueblos heridos, no más sangre, no queremos más niños traumatizados de por vida, no queremos más hombres muertos, ni más mujeres muertas por dentro.

VIVA LA NUEVA HUMANIDAD, QUE NOS LLAMA DESDE EL FUTURO YA MUY CERCANO, EN LA QUE CABEMOS TODOS,  y si no cabemos haremos espacio, y habrá espacio, SUPERANDO el dolor el sufrimiento, la desigualdad de oportunidades, la mentira, EL ABUSO Y LA VENGANZA, que es el eje de la civilización occidental..

En estos momentos nos sentimos unidos de corazón con la gente del pueblo Ukraniano, y la gente del pueblo ruso, que no quieren más sufrimientos propios ni ajenos.

Firmado: Plataforma de personas,  y grupos de Cuenca, multiculturales, con conciencia ética, cargados de utopías que estamos dispuestos a defender porque ha llegado su tiempo de dar los pasos para materializarse este año.
Cuenca, 25/2/2022
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Centro Joven