El Pleno de la Convención aprobó el Artículo 1º de la nueva Constitución, que establece un Estado Social y Democrático de Derecho y deja de existir el Estado subsidiario. Con ello se asegura el fin de la desprotección social que han sufrido chilenas y chilenos en sus condiciones de vida. Se termina así el privilegio que tienen los dueños del capital para mercantilizar servicios sociales. El Artículo 1º es un paso indispensable para terminar con las desigualdades y abusos que, desde hace 40 años, sufren las familias chilenas, pero también sienta las bases para que el país avance hacia un desarrollo económico diverso, inclusivo y con equilibrios medioambientales.